Hace ya dos años por estas fechas que me decidí a comprar un objetivo «vintage» del que había oído hablar y con el que tenia ganas de experimentar. Se trataba del Meyer-Optik Görlitz Trioplan 100mm f/2.8, un objetivo diseñado en la década de 1950 en la antigua Alemania del Este.

   Como es lógico este es un objetivo que solo se puede conseguir de segunda mano y con algún adaptador para poder acoplarlo en una cámara digital moderna. Así que pude conseguir un modelo «zebra» con montura Exakta que es como llaman al montado en aluminio negro en contraposición al otro modelo montado en aluminio plateado.

   La idea de adquirir este objetivo no era otra que indagar y profundizar en otro tipo de fotografía macro o de acercamiento. Esa eterna disyuntiva que debe de tener cualquier fotógrafo de plantearse nuevos retos, hacer cosas nuevas y, de este modo, ir aprendiendo y mejorando en los resultados, a la par que aumenta y enriquece su portfolio personal.

 

Bajo el foco

 

   Lo que me brindaba el objetivo en cuestión una vez montado en mi cámara con su adaptador correspondiente era la posibilidad de conseguir un bokeh como pocos objetivos actuales consiguen. Eso si, sacrificando en gran medida esa nitidez extrema que te ofrece cualquier macro actual.

Orchis champagneuxii

 

   Todo un reto para alguien enganchado en la nitidez extrema en todas y cada una de las fotos macros que hace, pero algo necesario para ir evolucionando como fotógrafo.

   Por otro lado este objetivo brindaba una ocasión estupenda para poner en practica eso con lo que algunas veces había bromeado en foros y redes sociales de “tantoacercamientopaque”. El dar un pasito atrás y entrar en el paisaje y los ambientes mas que en los detalles del sujeto fotografiado.

Magico Amanecer

A la Sombra de un Alcornoque

 

    Añadido a su perdida de nitidez y fruto de ser una pieza óptica con mas de 60 años de diseño, este objetivo tiene unas fuertes aberraciones cromáticas que pueden ser integradas de modo artístico en la composición de las tomas. Otro reto más.

 

Pieris brassicae

Donde viven las hadas

 

    Acoplando al objetivo un tubo de extensión para poder acercarte al sujeto y utilizando tanto el estupendo bokeh del objetivo como las aberraciones cromáticas que se producen, hacen que se puedan componer instantáneas con un ambiente evocador donde no se eche en falta la falta de nitidez en comparación con un macro actual.

Dos boletus

Cytinus sp

 

    Además, en estos tiempos que corren, que la premisa parece ser cambiar compulsivamente de equipo e ir comprando objetivos y cámaras mas modernos, mejores y mas caros, hace bueno el dicho “la foto la hace el fotógrafo y no el equipo”.